
Aprender un idioma extranjero requiere tiempo y dedicación. Las razones que se indican a continuación pueden ayudar a convencerle de que dé el paso, si es necesaria tal persuasión. Algunas razones son prácticas, otras aspirantes, otras intelectuales y otras sentimentales, pero sean cuales sean tus razones, tener una idea clara de por qué estás aprendiendo un idioma puede ayudarte a motivarte en tus estudios.
Muchos empresarios angloparlantes no se molestan en aprender otros idiomas porque creen que la mayoría de las personas con las que hacen negocios en países extranjeros pueden hablar inglés, y si no lo hablan, se pueden utilizar intérpretes. La falta de conocimiento de lenguas extranjeras pone en desventaja a los angloparlantes. En las reuniones, por ejemplo, la gente del otro lado puede discutir cosas entre ellos en su propio idioma sin que los angloparlantes lo entiendan, y el uso de intérpretes ralentiza todo. En cualquier socialización después de las reuniones, los locales probablemente se sentirán más cómodos usando su propio idioma en lugar del inglés.